El aprendizaje a través del juego

Por Óscar Antonio Martínez Molina
Universidad Nacional de Educación, Ecuador
oscar.martinez@unae.edu.ec
Orcid: https://orcid.org/0000-0003-1123-5553

(Esta temática que se presenta forma parte de un artículo que está siendo considerado para su publicación.)

El Grupo de Investigación en Educación y TIC (GIET), conformado por jóvenes investigadores, pretende afrontar los retos que ofrecen la generación, divulgación y aplicación de tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en la educación, en la pedagogía y en el currículo, contribuyendo a la formulación y al desarrollo de soluciones innovadoras y efectivas, de acuerdo a las necesidades de la región y el país, mediante una reflexión crítica en su práctica investigativa. Desde sus inicios, el grupo está incursionando en espacios de investigación y logrando un reconocimiento local, nacional e internacional. GIET, en términos generales, tiene entre sus objetivos la construcción, apropiación y divulgación del saber relacionado con la educación y con las TIC.

Como base para justificar la pertinencia del trabajo del grupo GIET en sus líneas de investigación y campos de actividad, encontramos la necesidad de indagar permanentemente desde la universidad las formas de vinculación de los procesos de desarrollo educativo y tecnológico con las esferas de realización humana en lo científico y lo sociocultural. La introducción intensiva de la tecnología en la educación ha modificado la estructura organizativa de las instituciones, los roles de docentes y estudiantes, los materiales de aprendizaje y la gestión de las políticas, de las normativas y de la planeación estratégica de sus procesos internos. Estas innovaciones organizacionales y pedagógicas son el resultado de la aplicación de la tecnología como herramienta en los procesos formativos y como derivación del uso coherente e integrado al servicio de la educación desde el aspecto curricular. Hoy no pueden concebirse las organizaciones educativas ni los procesos de enseñanza y aprendizaje al margen del fenómeno tecnológico, en especial de las TIC y de las tecnologías de aprendizaje y conocimiento (TAC), en correspondencia con lo planteado en teorías como el conectivismo y el constructivismo.

La producción y aplicación de sistemas y procesos educativos y tecnológicos son dimensiones que adquieren cada vez más relevancia, en tanto se han convertido en factor de potenciación de facultades para alcanzar mejores estándares de desarrollo de las comunidades. La dimensión investigativa de la universidad, bajo la premisa de la dinámica de la sociedad del conocimiento, y los cambios generados por el actual avance de esta en el contexto de un entorno globalizado, con énfasis en la innovación y desarrollo, así como los requerimientos que ello conlleva, plantean nuevas exigencias a las estrategias en pro de construir ambientes de investigación acordes con las nuevas necesidades y demandas. Estas nuevas directrices investigativas deben generar ambientes de aprendizaje en los que se conjugue el trabajo disciplinar e interdisciplinar, respondiendo con eficacia a las exigencias del entorno actual. Estos ambientes de aprendizaje, apoyados por las TIC y las TAC, formalizados a través de redes académicas, facilitarán el intercambio de información y la interacción continua entre los investigadores pertenecientes a grupos de investigación, instituciones y, en general, comunidades académicas nacionales e internacionales. De este modo, la investigación que se realice al interior de las instituciones de educación superior será coherente con el contexto actual, dando respuesta a las exigencias de la era del conocimiento y de la información.

La formación de investigadores noveles se proyecta como alternativa educativa. Este trabajo se sustenta en una reflexión crítica que se fundamenta en el rol del investigador en el nivel de pregrado. De ahí que el propósito es presentar el diseño de un modelo de formación de investigadores desde las comunidades de aprendizaje, con el fin de dar respuesta a un conjunto de debilidades que se plantean desde la mirada de actores involucrados en el proceso de formación universitaria. El método de la presente investigación se basa en el paradigma sociocrítico, fundamentado en la investigación documental. Desde esta perspectiva, aportamos promoviendo la investigación en educación integral bajo la ejecución de un modelo que contiene tres elementos, a saber: prototipo de ampliación de asignaturas; incorporación del perfil de investigador social; y creación de plataformas de apoyo. El modelo se complementa con un conjunto de ideas claramente estructuradas para su aplicación.

Hasta la actualidad, como resultados del grupo, conformado por doce investigadores noveles, entre profesionales y estudiantes, se ha logrado en estos últimos meses:

  • Participación en el Segundo Congreso Internacional de Educación “Yo Educo: Transformación Digital: Retos y Futuro en la COVID-19”, con ocho ponencias. A través de este congreso, ocho integrantes del grupo compartieron sus propuestas de investigación innovadoras, con la finalidad de generar un cambio en la educación. Además, es pertinente mencionar la gran acogida que se tuvo en la exposición de estas ponencias.
  • Presentación del grupo en el programa de entrevistas “Tendencias y desafíos”, en el cual, mediante un conversatorio, se pudo dar a conocer los retos y desafíos que enfrentan los estudiantes universitarios en la educación virtual, desde la percepción de nuestros investigadores.
  • Elaboración del proyecto iconográfico de recursos tecnológicos.
  • Elaboración de cinco ensayos académicos para publicación en revistas de alto impacto.
  • Planificación, organización y ejecución del Coloquio Internacional Universitario “Educación inclusiva con enfoque de género en la COVID-19”.

El grupo GIET ha alcanzado metas como equipo colaborativo, participativo y cooperativo, con una integración que se calificaría como “todos para todos”; de ahí su alta productividad.

Ph.D. Óscar Antonio Martínez Molina.
Director del grupo GIET